Pensamientos y pesares

En este blog, daré cabida a pensamientos personales sobre diferentes temas sin mas pretensión que dar vía libre a mis pensamientos y sentimientos.

lunes, 14 de marzo de 2016

Pena de muerte

Imagen sacada de un interesante artículo del Huffington post
Antes de empezar quiero decir que aunque reconozco que mis sentimientos a veces me traicionan ante graves dramas desde el punto de vista de mi razón soy una persona que solo concibo la muerte de otra persona cuando la eliminación de esa persona es inmediata, y la muerte de la persona a eliminar supone la salvación de otras, por ejemplo actuar ante una persona disparando en la calle a los transeúntes.

Por desgracia cada vez escucho más voces a favor de la reinstauración de la pena de muerte y a en numerosas ocasiones se recurre al típico argumento que ya hable de él en otra ocasión “como a ti no te ha pasado” y ciertamente si a mí me habría pasado algunos graves dramas pensaría como los que defienden la pena de muerte, pero como no me ha pasado puedo razonar desde un punto de vista alejado del sentimiento aun reconociendo que muchas veces en caliente, cuando me entero de monstruosidades también me gustaría ejecutar. Esta es mi gran contradicción que viene de la lucha razonamiento y sentimiento.

Yendo a lo práctico contare la historia que me llevo a estar en contra de la pena de muerte.

Hace muchos años vi un documental que he buscado infructuosamente en internet sin resultados. En este documental salía un hombre que consciente del dolor que había causado acepto la pena de muerte, y para evitar que su muerte fuera en vano pues él se creía merecedor de esta, dedico sus últimos días de vida a crear un documental de su vida para evitar que adolescentes cayeran en la delincuencia. Ahí me di cuenta que quien entro en la cárcel era una autentica bestia pero la persona que mataron fue un hombre bueno.

Buscando ese documental encontré otro que es el que acompaña a este post que tiene opción de subtítulos y que tiene el mérito de ser el primer documental rodado en un corredor de la muerte y he visto muy buenas reflexiones, algunas me han emocionado, como la de Dennis Manford que dice que tras la muerte de un hombre por asesinato no se acaba todo en ese momento, queda el sufrimiento de su gente.

Por otra parte en muchos queda una tortura que es miles de veces peor que la muerte que es la del remordimiento y esto hace que algunos quieran mil veces la muerte antes de seguir viviendo con ese sufrimiento.

Es muy fácil acabar con quien mata después de que mate, pero ¿Cómo evitar que se de ese paso? ¿No será que cada uno de quienes formamos la sociedad tenemos un poco de culpa?

Cada vez que ignoramos el sufrimiento de un niño, por acoso escolar o por una difícil situación en su casa, cada vez que abandonamos a una alcohólico o un drogodependiente a su suerte, cada vez que condenamos a una persona a la soledad, cada vez que despreciamos a alguien por el motivo que se ale encaminamos a varios malos caminos y sin lugar a dudas uno de esos caminos aunque no sea el único es el del asesinato.

¿Por qué no hay una protección del individuo que atienda a las personas y le ayude a que todas esas personas niñas, adultas o ancianas, consigan todo lo que se necesita para vivir como ser humano? Sin embargo preferimos llevarnos las manos a la cabeza cuando un drama sucede y luego competir a ver quién es mas bestia aplicando castigos, pero claro, “como a mí no me ha pasado…”



No hay comentarios:

Publicar un comentario

No dudes en dejar tu opinión.