No estabas borracho, eras simplemente tu

El alcohol muestra nuestro verdadero "Yo"

¿Cuántas veces escuchamos la frase “estaba borracho, para justificar lo que no tiene justificación? Es fácil decir cuando se hace alguna barrabasada “estaba borracho” como si eso lo exculpara todo, sin embargo, una persona borracha puede disculparse por tropezar y romper algo en estado de embriaguez, pero no puede disculparse de violar, agredir, golpear, insultar o cualquier otra causa desagradable. El alcohol no empuja a anda de ello por mucho que muchos energúmenos esgriman ese argumento tan estúpido como emborracharse a propósito (entono un mea culpa de haber sido de esos que en algún caso han bebido de mas).

El alcohol no vuelve a uno violento, malhablado, o agresor sexual, no lo hace en absoluto. Eso viene de serie, el alcohol lo único que hace es diluir las fronteras de autocontrol. Si una persona cumple alguna de estas condiciones y sereno se impone auto limites que con el alcohol saltan por los aires. Por eso mejor convertirse en una buena persona antes de tener que exculparse ante un acto repugnante con un “estaba borracho” pues de un cinismo atroz, pues el alcohol solo saca nuestro verdadero ser. Hay un refrán irlandés que lo resume.

"Si quieres saber como es realmente un hombre, emborrachalo"